Devil May Cry: ¿Sueño o Realidad?

Prologo.
Regresaba tarde de una pequeña fiesta que habían organizado sus amigas, la suerte era que sus padres actualmente se encontraban en algún casino divirtiéndose, despreocupados de su hija de dieciséis años –La cual en teoría debería haberse quedado en su casa cuidando a…sus mascotas-
-Mierda…- al mirar el reloj vio que este mostraba la hora del diablo -3.00 a.m- Intentaba moverse con estabilidad mientras caminaba por una calle oscura, pronto debería pasar un terreno baldío que alojaba toda clase de personas. No estaba a muchas cuadras de donde actualmente caminaba, pero pasar esas calles se le hacía eternamente largo.
Intento pensar en cualquier cosa insustancial.

Era una gamer, extremadamente viciosa a juegos con sangre y muertos vivientes. No estudiaba, era una maldita holgazana, que vivía de sus padres. –Okay no te pases…ni tanto, si que trabajo- Ocupaba su tiempo libre –TODAS LAS SEMANAS, DE TODOS LOS JODIDOS DÍAS- en escribir, cosas sobrenaturales, sádicas y sin romance, podría agregar que odiaba lo cursi. Su actual mayor vicio se llama Dante…Devil May Cry (N.A: xD) venera la personalidad del semi-fucking-demonio y odia a Capcom por haberle dejado el juego a Ninja Theory. –Lo han convertido en un emodrogadictofumadordemonioetilico (N.A: ¿?)
No se consideraba una persona cobarde pero en aquel momento temblaba –aunque podía excusarse con que hacía frío…nadie notaría la diferencia-

Generalmente las personas la miraban con mala cara cuando utilizaba su sarcasmo. Le gustaba molestar a las personas, en sobremanera a su madre, era su punto favorito. Discutía por todo y siempre tenía que tener razón. –Motivo por el cual su queridísima mami siempre se molestaba-
Actualmente para ella había encontrado un lindo apodo: Mundus…el terremoto Mundus (N.A: =3)

Comenzó a cantar una canción en voz baja, lo mejor que pudo.

He had to fight back tears of rage, his heart beat like a drum, for with the wife of his best friend, he spent his final night of freedom. Over the hills and far away, he swears he will return one day, far from…

Dejó de cantar abruptamente cuando una fresca brisa la hizo tiritar.

-Bonita canción- Tuvo que poner en mode on su mente, puesto que esta se había quedado en punto muerto, aquella voz se le hacía tremendamente familiar y pese a que no conocía a nadie de sus personas más cercanas que hablaran el inglés tan bien, tuvo un momento de parálisis extrema. –Tía, tienes que admitirlo, estás jodida, entra a correr antes que se le sumen más- Aceleró el paso tanto como sus pies se lo permitieron.

-¡hey espera! Solo quería preguntar algo- Trató de detenerla pero ésta comenzó a correr, le hubiera creído, ¿pero que tenía que preguntar un extraño a una joven a las tres de la madrugada? Quizá algo como… ‘¿puedo violarte?’ Escuchó claramente cuando tomó carrera alcanzándola enseguida, le tocó el hombro y esta saltó en sí misma. Para aquel momento su mente ya gritaba, aunque de su garganta no salía nada. – ¿Ruega?-

-eh chica, solo quería preguntarte donde cojones estoy, es que estoy perdido- Se dio la vuelta con cautela y si no hubiera sido porque era una persona de carne y hueso, su mandíbula estaría desencajada muy al estilo anime. Da…Da…Dan…te… ¿¡Dante!? Oh dios…aquello debía ser producto de algo que le habían metido en la bebida, era una jodida alucinación, pasar tanto tiempo con Devil May Cry y escribiendo sobre Dante le estaba jodiendo la mente –Más…si eso era posible- debía llegar a su casa antes que aquello siguiera.

Esa débil falencia...

te costó terminar así.

Pero con constancia,

lograste salir de nuevo a flota.

Te mantuviste remando,

pese a las malas voces.

Y aquí estás.

Rendido ante tu propia fatiga.

Sin esperanza.

Y sobre todo.

Sin amor.

-¿Valió la pena regresar?-

Te preguntas.

Y obtienes una respuesta,

que mantiene viva la llama,

esa llama que prendió tiempo atrás

y que de a poco fue perdiendo vigor.

Comprendes.

No debes dejar llevarte por la marea...

ese mar de cuerpos y sangre,

personas.

No te dejes arrastrar por las ponzoñosas palabras.

Ignora. Vive.

Se tú y no le rindas nada a nadie.

Por: Alanah C.